La noticia golpeó con fuerza en La Plata. Felicitas Alvite, más conocida como «La Toretto», se entregó a las autoridades judiciales luego de verse envuelta en un fatídico accidente que cobró la vida de un motociclista. El destino de esta joven de 20 años dio un giro abrupto cuando su Volkswagen Gol Trend colisionó con la moto en la intersección de las calles 13 y 32.
El trágico suceso tuvo lugar el jueves 11 de abril, cuando Alvite, según testigos y cámaras de seguridad, cruzó un semáforo en rojo a una velocidad desmesurada. La colisión lateral con la motocicleta conducida por Rubén Walter Armand, de 36 años, fue inevitable. El impacto lanzó a Armand al asfalto, provocándole heridas fatales que lo llevaron a perder la vida, a pesar de los esfuerzos del personal médico del Hospital del Gonnet.
La joven conductora enfrenta ahora una acusación de «homicidio simple por dolo eventual», lo que ha generado un revuelo en la opinión pública y avivado el debate sobre la seguridad vial y la responsabilidad de los conductores en las calles y rutas de la ciudad. La decisión de la Sala III de la Cámara Penal de confirmar su detención hasta el viernes agrega un capítulo más a esta historia que ha conmocionado a toda La Plata.
El apodo de «La Toretto» hace referencia a un personaje de la famosa saga de películas «Rápidos y Furiosos», y su implicación en este incidente ha añadido una capa de morbo a la tragedia. Sin embargo, más allá de los apodos y los titulares sensacionalistas, está la realidad dolorosa de una vida perdida y una familia destrozada por las consecuencias de un acto irresponsable al volante.
El fiscal encargado de la investigación ha solicitado que la causa pase a manos de la fiscalía de delitos dolosos, lo que indica que el caso está lejos de ser resuelto. La justicia deberá determinar el grado de responsabilidad de Alvite en este trágico episodio y decidir las consecuencias legales que enfrentará.
Mientras tanto, en La Plata se respira un aire de consternación. Este suceso ha recordado a todos que la seguridad vial es un tema crucial que afecta directamente a la vida y la integridad de las personas. Las calles y avenidas no son pistas de carreras, y cada conductor tiene la responsabilidad de conducir de manera prudente y respetuosa.
La tragedia de «La Toretto» y su encuentro fatal con Rubén Walter Armand son un recordatorio sombrío de las consecuencias devastadoras que puede tener un error al volante. La ciudad espera con ansias el desenlace de este caso, pero sobre todo, espera que sirva como lección para que todos los conductores sean más conscientes de su responsabilidad al volante y contribuyan a hacer de las calles un lugar más seguro para todos.